Las palpitaciones en uno o ambos ojos, que duran poco tiempo y se repiten en varias oportunidades durante el día y que comúnmente referimos como un “tic nervioso” reciben el nombre de Blefaroespasmos.
Técnicamente se conoce con el nombre de Fasciculación del orbicular del párpado, suceden por contracciones involuntarias del músculo encargado de cerrar los párpados (el orbicular). Las palpitaciones pueden suceder tanto en el párpado superior como en el inferior.
Tabla de Contenidos
¿Cuáles son los síntomas de blefaroespasmo?
Es importante saber cuales son los síntomas que indican la presencia de este trastorno. Entre ellos se citan: el parpadeo y cierre involuntario de los ojos, también la sensibilidad a la luz (fotofobia), la sequedad ocular, el parpadeo excesivo e incontrolable con poca duración y con intensidad variable. Puede haber disminución de la visión en casos muy fuertes.
Muchas veces estas contracciones musculares tienden a desaparecer durante el sueño, afecta a personas de todas las edades, sobre todo a adultos mayores y es más frecuente en las mujeres.
Otros síntomas son: las contracciones incontrolables de los párpados, el cierre involuntario de los ojos, algunas veces se cae el párpado superior.
Se recomienda que si los síntomas permanecen por mucho tiempo, se debe recurrir al especialista.
¿Por qué suceden las contracciones del párpado?
Cuando comienzan los espasmos estos se manifiestan de diferentes maneras, algunas veces son intermitentes y permanecen unos pocos días, luego dejamos de sentirlos. Otras veces la distonía es más duradera y puede ocasionar serios problemas como la caída del párpado y esto ocasiona problemas en la visión.
Entre las causas que se observan se encuentran las neurológicas, las cuales se manifiestan por contracciones en la parte inferior de la cara, mandíbula y alrededor de los ojos.
También están los ocasionados por el uso de fármacos, sobre todo los utilizados para las cefaleas y migrañas, la resequedad del globo ocular (queratoconjuntivitis seca), la irritación de la córnea o conjuntiva ocular, también se citan la cafeína, el estrés y el alcoholismo.
Tipos de blefaroespasmos
De acuerdo a los datos clínicos las contracciones orbiculares o espasmos pueden presentarse de tres maneras:
- a) El espasmo o contracción menor del párpado
- b) El Blefaroespasmo benigno esencial
- c) El espasmo hemifacial.
El espasmo o contracción menor
Esta anomalía casi nunca requiere de atención médica, se presentan y luego desaparecen y a veces la persona ni cuenta se da. Este tipo se manifiesta como un tic nervioso en el párpado y puede tener origen por situaciones de estrés, falta de sueño, a la cafeína y al consumo excesivo de bebidas alcohólicas y estimulantes. Estas contracciones no tienen causa específicas de aparición.
El blefaroespasmo benigno o esencial
Es una alteración física, afecta a los dos ojos, y puede estar asociado a movimientos espontáneos de cuello, cabeza y boca. Las contracciones son progresivas y aumentan tanto en intensidad como en frecuencia y en algunos casos puede llegar a ser invalidante.
El blefaroespasmo hemifacial
Este trastorno afecta a los músculos de un lado de la cara, aunque se han descrito casos de bilateralidad. El responsable de este malestar es el nervio facial homolateral, que cuando se excita afecta a músculos de la cara como el orbicular, los músculos alrededor de la boca y al frontal. Causando movimientos involuntarios irregulares y progresivos del párpado que causan muchas molestias.
Afecta más a mujeres en edad adulta que a los hombres en edades por encima de los cuarenta años.
Diagnóstico
El diagnóstico de esta patología es totalmente clínico, no existe prueba especial o específica para ello. Aunque a veces es necesaria una revisión neurológica en busca de alguna lesión, por lo que se hace indispensable realizar exámenes como resonancia magnética y tomografía computarizada.
No hay evidencia científica de que el Blefaroespasmo sea hereditario, pero sí hay reportes médicos que en una misma familia varios miembros presentan este trastorno ocular.
Consecuencias del blefaroespasmo
De acuerdo a la frecuencia, intensidad y duración esta patología puede ocasionar daños transitorios o permanentes los cuales van desde dificultad para hablar, comer, leer y en extremo convertirse en ciego funcional. El blefaroespasmo puede conducir al aislamiento social.
Tratamiento de los temblores en los párpados
Dado que la enfermedad afecta desde el punto de vista social y funcional, el propósito del tratamiento es ayudar a los pacientes a mantener calidad de vida para él y su grupo familiar.
En general los espasmos o contracciones del párpado pueden desaparecer sin intervención alguna y la persona ni cuenta se da. Existen casos como por ejemplo, el disminuir el nivel de estrés y la ansiedad puede servir a que los espasmos desaparezcan y no se repitan.
También hay remedios caseros. Algunas veces se emplean gotas humectantes a fin de mantener los ojos hidratados, utilizar lentes de sol, intercalar compresas de agua fría y caliente en la zona afectada algunas veces da buenos resultados.
En otros casos el tratamiento consiste en la aplicación de inyecciones de la toxina botulínica tipo A, este es un tratamiento opcional, el efecto es perecedero, dura tres meses máximo por lo que se hace necesario repetirlo. El tratamiento quirúrgico denominado Miectomía (eliminación del músculo responsable del cierre de los párpados), es una solución que se recomienda a pacientes que muestran resistencia al tratamiento con la toxina botulínica A.
Prevención
La prevención hasta ahora no es posible, detectarlo a tiempo si lo es y con ello disminuir los efectos negativos que tiene sobre la salud y por ende en la calidad de vida. La detección temprana permite tomar medidas para aliviar los síntomas o hacer que desaparezcan.
Para esto se deben tomar previsiones como el descanso visual, la relajación emocional, el dormir sin preocupaciones. Otras medidas son tratar de eliminar los factores estresantes, reducir el consumo de bebidas estimulantes como café, te y alcohol. La hidratación ocular es muy importante para evitar la resequedad de los ojos.
Es importante que a modo de prevención, que cualquiera sea la sintomatología presentada que conduzca a espasmos o contracciones oculares, acudir al oftalmólogo para su detección temprana y tratamiento médico indicado.