Tabla de Contenidos
La catarata es una nubosidad u opacidad en el cristalino del ojo que se manifiesta en personas mayores de 40 años, causando pérdida de la visión.
Estudios recientes indican que el 33% de las causas de ceguera a nivel mundial, corresponden a cataratas no operadas a tiempo en el 65% de los afectados mayores de 50 años.
Este dato representa aproximadamente a 285 millones de personas con ceguera, de los cuales un 90% pertenecen a países de bajos recursos económicos.
Sin duda, las cataratas constituyen un problema regular de salud alrededor del mundo, de manera que la intervención quirúrgica debe realizarse a tiempo para impedir el envejecimiento ocular progresivo.
Causas
Además de la edad, existen factores de riesgo que pueden acelerar la aparición de las cataratas. Los golpes, cortes y quemaduras por calor intenso o agentes químicos son algunas de las causas que influyen en la aparición de cataratas.
Al mismo tiempo, es importante saber que las cataratas no aparecen por forzar la vista, pero la exposición a la luz intensa también se vincula al desarrollo de cataratas antes lo de normal.
Otro factor de riesgo compete a la rubéola durante el embarazo, dado a la infección que puede perjudicar al feto durante la gestación. No obstante, son casos muy extraños y poco comunes, dado a las medidas preventivas que existen en la actividad.
Otros factores de riesgo que pueden generar la aparición de las cataratas son:
- Diabetes.
- Hipertensión.
- Obesidad.
- Tabaquismo.
- Terapia de reemplazo hormonal.
- Consumo excesivo de alcohol.
- Antecedentes de cirugía ocular.
- Miopía grave.
Síntomas
Según el tamaño y el área afectada del cristalino del ojo, los síntomas de las cataratas pueden ser variables. De hecho, una persona puede llegar a notar que sufre de cataratas una vez ésta empiece a interferir con la visión.
De esta manera, es evidente que la disminución de la agudeza visual es uno de los primeros signos a identificar durante el desarrollo de la catarata. A su vez, los ojos pueden llegar a presentar mayor sensibilidad a la luz y menor nivel de conducción sobre la misma.
La alteración en el matiz de los colores, es otro síntoma común, y generalmente también se puede llegar a sufrir diplopía.
Tipos de Cataratas
La catarata más frecuente se debe al transcurso de la edad y se conoce como catarata senil. Aparece comúnmente entre los 65 y 70 años de edad , aunque existen personas que pueden llegar a sufrirlas a una edad más temprana.
Además de la catarata senil, el Instituto Nacional del Ojo de Estados Unidos, clasifica la aparición de cataratas de la siguiente manera:
- Catarata secundaria: Son aquellas que aparecen luego de una cirugía tras haber tratado otras patologías, como es el caso del glaucoma.
- Catarata traumática: Aparecen como consecuencia de golpes fuertes en el ojo.
- Catarata congénita: Se producen después del nacimiento como parte de un defecto congénito.
Catarata por radiación: Corresponden a un tipo de traumatismo ocasionado por exposición a la luz ultravioleta o agentes químicos.
Diagnóstico
Para el diagnóstico de la catarata existen pruebas específicas que se llevan a cabo mediante el uso de un oftalmoscopio y una lámpara de hendidura.Con ambas herramientas, el médico examinará los ojos y realizará una evaluación previa en la que normalmente se pide identificar letras e imágenes.
El nivel de ceguera y la estructura del ojos determinarán la gravedad de cada caso en particular y una vez se confirme el diagnóstico, se procederá inmediatamente al tratamiento en cuestión.
Tratamiento
Para el tratamiento se recurre a la utilización de anteojos especializados, una iluminación apropiada y otros recursos visuales efectivos. Se considera apropiada la cirugía únicamente cuando la disminución de la visión afecta nuestra vida cotidiana.
De ser así, es importante saber que la cirugía de la catarata es un procedimiento indoloro y simple, capaz de devolver la visibilidad del paciente afectado. Durante la intervención se remueve el cristalino nublado y se suplanta por un lente intraocular plástico.
Se estima que nueve de cada diez personas pueden recuperar la vista y llevar una vida normal luego del tratamiento.
El Uso de Gafas Después de la Cirugía
Como medida de prevención, generalmente se recomienda el uso de gafas después de la cirugía para corregir errores de refracción y presbicia.
A su vez, es importante ejercitar la vista y acudir regularmente a su médico de confianza para exámenes periódicos que manifiesten el progreso de nuestro caso.
Prevención
Los últimos estudios indican que ciertos nutrientes y suplementos pueden llegar a reducir el riesgo de desarrollar cataratas. Por consiguiente, se recomienda el consumo de vitamina E en adultos, ya que los carotenoides, la luteína y la zeaxantina, se vinculan con la reducción significativa del riesgo de sufrir cataratas.
Las semillas de girasol, la espinaca y las almendras, también son fuentes ricas de vitamina E, por lo que también se recomienda su ingesta una o dos veces al día. Otros analistas defienden el consumo de vitaminas antioxidantes como la vitamina C y el omega 3, puesto que son capaces de nutrir el cristalino ocular.
Por otra parte, también es importante recurrir al cuidado externo de manera directa. En este sentido, es crucial el uso de gafas protectoras al alcanzar cierta edad, ya que la intención es bloquear el contacto directo de los rayos UV cuando nos encontramos al aire libre.