Las afecciones hemorroidales casi siempre aparecen y desaparecen a medida que cambias o adaptas tus formas de vida y condiciones alimenticias. Pero cuando los problemas van más allá de los simples hábitos, se pueden presentar complicaciones serias o alarmantes.
Tal es el caso de las hemorroides con punta blanca, pues como debes imaginarte, este punto seguramente es la señal de que tus hemorroides se han infectado y en lugar de almacenar sangre ahora almacenan pus. Si ese es el caso, la atención médica debe ser solicitada inmediatamente.
Aquellas hemorroides que alcancen una infección alta pueden causar problemas en otras áreas, incluso en el mismo ano, pudiendo formar abscesos anales. Es importante que las hemorroides siempre sean vistas por un médico para evitar este tipo de complicaciones.
En ese sentido, toda persona que tenga una enfermedad hemorroidal debe estás consciente de que las hemorroides con un punto blanco no son una buena señal. Por esa razón en este post te daremos toda la información que necesitas acerca de esta condición. Quédate leyendo.
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Por Qué Sale un Punto Blanco en las Hemorroides
El ano y el recto son áreas muy pequeñas en las que cualquier molestia puede asociarse por creencia popular con las hemorroides. Pero, debes saber que esa no es la única afección que puede perjudicar la zona anal.
Indubitablemente, en algunos casos muy extremos y raros las hemorroides pueden desarrollar un punto blanco y es porque se ha infectado la sangre acumulada. Lo que posteriormente ocasiona la salida de una mucosa blanca o amarillenta (pus).
Sin embargo, es mucho más frecuente que en el ano se produzcan otros tipos de lesiones que se mal atribuyen a las hemorroides, pero que no son más que abscesos anales.
¿Qué es un Absceso Anal?
Los abscesos anales son pequeñas protuberancias infectadas que se producen alrededor del orificio anal y también en otras áreas del recto. Estos son producidos por bacterias que se introducen al organismo por la misma área anal.
Este padecimiento se puede clasificar en de diferentes formas según el lugar del recto donde se desarrollen. Generalmente se confunden con las hemorroides porque en un principio pueden verse abultados, ser dolorosos y tener un color rojizo.
Cuando la infección del absceso está progresando es común que el paciente presente cuadros febriles y es ese el síntoma que puede indicar que no se trata de simples hemorroides. Si generalmente sufres de hemorroides y con un periodo inflamatorio te da fiebre, debes ir al doctor.
¿Cómo saber que realmente es una Almorrana con punto blanco?
A simple vista tuya es imposible que puedas determinar si lo que tienes es un absceso o una hemorroide inflamada, porque en ocasiones los abscesos pueden salir en las mismas áreas donde frecuentemente se te inflaman las hemorroides.
De cualquier modo, es común que los abscesos anales supuren por medio de un punto blanco, mientras que las hemorroides aunque lo tengan, no tienden a supurar. Ese puede ser un aspecto bastante importante para que tu medico compruebe si se trata de hemorroides o no.
Para descartar que sea una u otra afección tienes que visitar a un proctólogo para que haga los estudios pertinentes a tu caso. Tanto en hemorroides como en abscesos, la evolución de la infección puede ser progresiva, por lo que puedes darte cuenta desde que tiene un punto blanco.
Tratamientos para curar hemorroides con puntito blanco en el ano
Con frecuencia, aunque se trate de un absceso anal o una hemorroide con punto blanco, el doctor tendrá que recomendarte la toma de antibióticos para acabar con la infección que ciertamente estas sufriendo. Aunado a ello es de gran ayuda que consideres otros remedios complementarios.
Es por eso que aquí te aconsejaremos los complementos perfectos para que aquellas hemorroides infectadas puedan curarse más pronto de lo que esperas. Dichos tratamientos son:
1. Anís cribado
El té de anís cribado es perfecto como coadyuvante en el tratamiento de las hemorroides infectadas o abscesos anales. Este remedio te proporciona la desinflamación de las paredes ano-rectales. Lo recomendable es que tomes una taza pequeña antes de cada comida.
Elimina aquellos gases putrefactos que podrían empeorar la situación de la inflamación hemorroidal y permite que tus procesos digestivos sean más suaves. Esto es necesario cuando pretendes quitar la infección de las hemorroides porque se evita el decaimiento.
Con el anís cribado también se reduce el estrés, tanto anímico como corporal, por lo que los músculos alrededor del ano estarán más descansados y aliviados.
2. Árnica
Usar árnica para los lavados de la zona hemorroidal será de mucho beneficio puesto que la flor de esta planta tiene propiedades antibacterianas y desinflamantes. Exactamente esto es lo que necesita aquella zona que se encuentra tan debilitada.
Ten en cuenta que a medida que el punto blanco se haya hecho más grande, significa que la infección es mayor y el riesgo de que se rompa también aumenta. Para que dicha infección se reduzca hasta desaparecer, es adecuado lavar el ano hasta 5 veces al día con infusión de árnica.
Con este tratamiento los músculos también recibirán la calma que necesitan y la zona estará menos tensa.
3. Bardana
La raíz de bardana representa uno de los tratamientos más efectivos para acabar con las infecciones de los abscesos o de las hemorroides. Para conseguir sus maravillosas propiedades se tiene que preparar un té con esta raíz y tomarlo 4 veces al día.
De esta planta se reciben favores antibacterianos, depurativos, antibióticos y antisépticos, precisamente todo lo que se requiere para eliminar el punto blanco de las hemorroides y obviamente la infección que lo ha llevado a estar allí.
La bardana es una planta que puede hallarse en tiendas herbolarias o naturistas. Siempre que las hemorroides tiendan a infectarse o a aparecer puntos blancos en el ano es aconsejable consumir bardana para acabar con las infecciones e inflamaciones.
Las hemorroides con punto blanco pueden ser una señal de que algo más complicado se está desarrollando en el organismo. Estas, no debería infectarse así como así, por lo que hay que ser precavidos y visitar al médico para descartar cualquier problema mayor.